Aproximadamente el 80% de las personas afectadas con problemas de salud mental están en situación de desempleo. La actual situación de crisis económica que vive Europa hace que el desempleo golpee aún con más fuerza a este colectivo.

Los trastornos mentales constituyen en nuestro país, como en el resto del mundo occidental, una causa muy frecuente de discapacidad, pérdida de calidad de vida, sufrimiento, aislamiento social, estigmatización y hasta mortalidad por suicidio.

La situación de desempleo entre las personas con Trastorno Mental Grave, ha llevado a la Asociación FEAFES Empleo a crear la Fundación Empleo y Salud Mental con el objetivo de mejorar la empleabilidad de las personas con enfermedad mental.

El acto de presentación de la Fundación Empleo y Salud Mental que se ha celebrado en Caixa Forum, a través del marco de trabajo de colaboración entre la Fundación la Caixa del programa Incorpora Salud Mental y la Fundación Empleo y Salud Mental, ha contado con la presencia del Secretario de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, D. Juan Manuel Moreno Bonilla quien ha manifestado su apoyo a la Fundación y  la integración laboral de personas con trastorno mental grave.

Asimismo, durante el acto, su presidenta, Anna Cohi, ha presentado un video institucional, que ha contado con la colaboración de Janssen, en el que se explica la misión de la fundación y la necesidad de generar recursos que apoyen a las personas con Trastorno mental en el ejercicio de su derecho al empleo.

Según Ana Cohi, Presidenta de la Fundación Empleo y Salud, “el colectivo de personas con Trastorno Mental, ha llegado en comparación con otros grupos de discapacidad, más tarde al acceso al empleo”.

“Hemos detectado que el nivel de formación puede ser mejorable, que los tipos de apoyo para poder acceder a un empleo y luego mantenerse también se puede mejorar y para ello queremos, a través de la Fundación Empleo y Salud Mental, agrupar a todo el sector de la discapacidad y el sector del empleo de manera que genere realmente un conocimiento sobre cómo lograr que las personas con trastorno Mental puedan acceder a un puesto de trabajo”, explica la Presidenta de la Fundación.

“Y no solo a un puesto de trabajo simplemente, sino a un puesto de trabajo de calidad, con formación y con un nivel de competencia equiparable a cualquier otra persona, y eso es un reto, ese es el reto que nos planteamos en la Fundación Empleo y Salud mental", añade.

En este contexto, José María Sánchez Monje, presidente de FEAFES, reclama medidas de apoyo para la integración laboral en los casos que sean necesarios y solicita a los empresarios que “abandonen los prejuicios en salud mental a la hora de contratar a sus trabajadores  ya que las personas con trastorno mental están perfectamente capacitadas para realizar todo tipo de trabajos”. 

“Las organizaciones tienen que participar, adaptarse y reflexionar a dónde van los mercados de trabajo. Actualmente, se está empezando a observar que el mundo empresarial tiene un interés creciente por las personas con discapacidad”, añade Stefan Trömel, especialista senior en Discapacidad de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

El trabajo, uno de los factores fundamentales para la integración

El empleo es un bien básico para todos los componentes de la sociedad, pero cuando se trata de las personas con discapacidad, ese 10% de la población, es un bien singularmente escaso.

“Tenemos tasas de paro muy superiores a las de las personas sin discapacidad y sigue siendo un problema estructural para las personas que representamos a este grupo social”, explica Luis Cayo, Presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).

Pero no para toda la discapacidad es igual. “Dentro de la propia discapacidad hay exclusión sobre la exclusión, y uno de los grupos que está especialmente afectado por esa ausencia estructural de acceso al empleo son la personas con enfermedad mental, las personas que tienen algún problema de salud mental, y si este es grave, todavía más. Y se tiene que hacer una acción positiva, una acción de discriminación positiva con los grupos que están especialmente peor”, concluye Luis Cayo.

A lo largo de la Jornada se ha plasmado la situación de las personas con Discapacidad y el empleo, en especial en las personas con Trastornos Mentales, instando a los agentes sociales tanto públicos como privados para que se realice un esfuerzo que permita el cambio necesario para mejor la situación actual.

Fuente: Berbés Asociados